A QUÉ VAMOS
“¡Qué alegría cuando me dijeron:
Vamos a la casa del Señor.
Ya están pisando nuestros pies
tus umbrales Jerusalén!”
“Mi visita es una
peregrinación personal y un viaje espiritual del Obispo de Roma a los orígenes
de nuestra fe en "el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, y el Dios de
Jacob" (Ex 3, 15). Forma parte de una peregrinación más amplia de oración
y acción de gracias que me ha llevado primero al Sinaí, el monte de la Alianza,
el lugar de la revelación decisiva que marcó la sucesiva historia de la
salvación. Ahora tendré el privilegio de visitar algunos de los lugares más
estrechamente vinculados a la vida, a la muerte y a la resurrección de
Jesucristo”.
San Juan Pablo II