sábado, 21 de septiembre de 2013

¡ESE NO ES MI PROBLEMA!


Como buenos cristianos o buenas personas sabemos que es la responsabilidad, pero que muchas veces se nos olvida ponerlo en práctica. Repasemos un poco esta virtud. 

La responsabilidad es una virtud que nos lleva a asumir las consecuencias de nuestros actos intencionados, resultado de las decisiones que tomemos o aceptemos; y también de nuestros actos no intencionados, de tal modo que los demás queden beneficiados lo más posible o, por lo menos, no perjudicados; preocupándonos a la vez de que las otras personas en quienes pueden influir hagan lo mismo. 

Ser responsable significa obedecer: obedecer a Dios y a Sus leyes, a la propia conciencia, obedecer a las autoridades, sabiendo que esa obediencia no es un acto pasivo, sino es la libre respuesta a un compromiso, a un deber. Es la otra cara de la libertad. Somos responsables precisamente porque fuimos creados libres.

Ahora veamos este video para entenderlo mejor de lo que hemos dicho.

            

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si te gustó el artículo, déjame tu comentario.