Hoy será la bendición del retablo de la parroquia de San Francisco de
Asís, Tecpán Guatemala. Un día de fiesta para todo el pueblo tecpaneco, les
dejo algunos datos de este este proyecto.
La autoría del altar mayor es anónima y pertenece a la primera mitad
del siglo XVII. Está ubicado en el presbiterio de la Iglesia Parroquial. Se
trata de un armazón mixto, de talla y pintura sobre madera. Es de factura clasicista: banco, tres cuerpos,
cinco calles y ático. Mide 14 metros de
alto y 8 de ancho. El material que lo
conforma es madera sólida (conífera) que sustenta la estructura de apoyo y la
construcción arquitectónica.
Las intervenciones realizadas en años anteriores por técnicos del
IDAEH ha permitido recuperar la mayor parte de la estructura del retablo. Han sido restituidos casi todos los faltantes
escultóricos y además se ha controlado la acción de los xilófagos. Pero la
reconstrucción de los dos primeros cuerpos de la calle central ha sido hecha
con desacierto. El cuerpo inferior ha
sufrido la invasión de elementos extraños: Un entablamento y una copia del
Cristo de Esquipulas hecha en 1994; además se ha perdido parte del entablamento
original y la hornacina u ostensorio y sagrario original. El banco ha sufrido la agregación de un tabique
de albañilería que sostiene el sagrario actual y altera la mesa del altar
mayor.
Las representaciones pictóricas y las esculturas, han sufrido
intervenciones de dudosa interpretación iconográfica. Se han perdido tres pinturas de divisas y no
todas las esculturas concuerdan con la temática del altar mayor. La mayor parte del laminado de oro y la
policromía se ha perdido debido a que las piezas estuvieron expuestas a la
intemperie después del terremoto de 1976.
La
Iglesia parroquial de Tecpán es una joya del patrimonio histórico y artístico
de la nación. Su altar mayor es signo de
la identidad de la ciudad y testigo de su historia. Requiere la reintegración y el cuidado constante
de sus piezas, por lo que la restauración del retablo mayor es importante. Este
maravilloso monumento nos muestra con sus heridas, sus cicatrices, su vejez, su
paso por la historia, con lo que ello tiene de trágico y grandioso: la lectura
detenida de esta obra nos transmite la sabiduría de las diferentes épocas.
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