sábado, 28 de julio de 2012

LA HONESTIDAD


   Vamos a hablar sobre una virtud que es muy importante en nuestra vida para poder crece en el ámbito humano, es una virtud fundamental en nuestra vida con los demás. Y decimos que esa virtud es la que armoniza nuestras palabras con nuestros hechos, es tener identidad y coherencia para estar orgulloso de sí mismo.

   La persona honesta es grata y estimada, es hermosa en su carácter y quien es honesto es bondadoso, amable, correcto, admite que está equivocado, cuando lo está; sus sentimientos son transparentes, su buena autoestima la motiva a ser mejor, no aparenta lo que no es, lo que proyecta a los demás es real.
   Para ser honesto es importante ser sincero con uno mismo, fiel a la promesa hecha con las personas con quienes convivimos o tratamos. Ser honesto es tener un comportamiento adecuado, correcto, justo y desinteresado.
   Es una virtud que se vive en la sinceridad, puede ser fácilmente herida y traicionada si causamos daño al otro con una opinión ácida, un comentario burlesco o una palabra grosera; cuando le atribuimos al otro defectos que no tiene o juzgamos con ligereza su actuar.
   Si queremos ser honestos, debemos empezar por enfrentar con valor nuestros defectos y buscar la manera más eficaz de superarlos, con acciones que nos lleven a mejorar todo aquello que afecta a nuestra persona y como consecuencia a nuestros semejantes, rectificando cada vez que nos equivocamos y cumpliendo con nuestro deber en todas las labores que se nos encomiendan, sin hacer distinción alguna.
   Esta virtud se aprende en la casa especialmente de nuestros padres, que son nuestros primeros maestros en la educación, lamentablemente no todos los padres son responsables en la educación de sus hijos, observemos por ejemplo este video.

 

1 comentario:

Si te gustó el artículo, déjame tu comentario.