Esta provocadora pregunta no se dirige
sólo a los interlocutores de aquel entonces, sino que llega a los creyentes y a
los hombres del hoy. Pero también hoy no pocos se “escandalizan” ante la contradicción
de la fe cristiana. La enseñanza de Jesús parece “dura”, demasiado difícil de acoger
y poner en práctica. Hay entonces quien la rechaza y abandona a Cristo; hay quien
intenta “adaptar” su palabra a las modas de los tiempos desnaturalizando su sentido
y valor.
¿También uds quieren marcharse?. Esta
inquietante provocación resuena en nuestro corazón y espera de cada uno una respuesta
personal; es una pregunta dirigida a cada uno de nosotros. Jesús no se conforma
con una pertenencia superficial y formal, no le basta con una primera adhesión entusiasta;
al contrario, es necesario tomar parte durante toda la vida “en su pensar y en su
querer”. Seguirlo llena el corazón de alegría y da pleno sentido a nuestra existencia,
pero implica dificultades y renuncias porque con mucha frecuencia se debe ir a contracorriente.
Feliz domingo a todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si te gustó el artículo, déjame tu comentario.